No nos vamos a engañar, este año hemos llegado a finales de mayo blancas nucleares. Tantas semanas confinadas que a penas nos ha dado un rayo de sol y, aunque no hay quién se salve de esta situación, ya sabéis lo que dicen: mal de muchos, consuelo de tontos. Así que, pongámonos manos a la obra para que la próxima vez que salgamos a la calle podamos lucir morenito. Otra cosa será que nuestra amiga la mascarilla nos deje enseñarlo, pero por nosotras que no sea 😉